miércoles, 31 de marzo de 2010

AMALGAMA.

I

Hablar del hélio en
las cabidades encefálicas;
todo un adorno que vislumbra
una cefalea.

Un recuerdo aquí,
un comprimido allá,
escondido de las fachas
de la higiene...

La asepsia, algo
de por no bastante sencillo,
una mirada hacia el exterior-interior,
hacia nosotros-ellos.

El fénix ha hablado
y yo de por mí, lo sigo.

II

Calistenia de vapores
en un vaivén califragilístico,
en plenos pensamientos
de color epidural.

Pasado y preturo
de cabello corto,
de inmensa pampa,
de ardor porteño,
de adiós mocoso
y un hola longebo...

Para qué escribir si
están los libros y para
qué pintar si las polaroid...
son de hoy; las tintas
son de ayer.

Qué más decir si
no hay nada por,
qué más pensar si
a lo sumo no hay en quién.

Qué más...
Qué más...
Qué más...

No hay comentarios:

Publicar un comentario